La piel de cuello y escote es de las primeras en delatar el paso del tiempo, presentando manchas, rojeces, arrugas y deshidratación, ya que es una zona pobre en glándulas sebáceas y tejido adiposo y posee menor cantidad de melanocitos y fibras de colágeno y elastina. A la vez, son zonas muy expuestas a la radiación solar. Todo ello conlleva a un envejecimiento prematuro de esta zona en relación a otras zonas corporales.
Después de una valoración médica, en Clínica Carmen Pérez indicamos el tratamiento más adecuado, siendo la mayoría de las veces, la combinación de varios métodos la mejor opción para obtener los mejores resultados.