El contorno de ojos es la zona del rostro en que la piel es más delicada. En él se concentran los principales signos de envejecimiento de los tejidos. A las pequeñas arrugas se le pueden sumar la flacidez de los párpados caídos y las bolsas que dan al rostro un aspecto cansado y falto de vitalidad.
Si hasta el momento la cirugía era el único método efectivo para eliminar la piel laxa entorno a los ojos, la aparición del tratamiento con Plasmage® permite rejuvenecer la mirada de forma mínimamente invasiva sin necesidad de pasar por el quirófano de forma segura y rápida.
La befaroplastia sin cirugía con el tratamiento Plasmage® consiste en la aplicación sobre el párpado de un potente haz de luz capaz de generar plasma frío que cuando se acerca a la piel consigue convertir en vapor el agua del tejido, con la que se logra la retracción de la piel de los párpados, corrigiendo su laxitud; los mejores resultados se obtendrán siempre con la intervención de un médico debidamente formado para la aplicación de la técnica.
Es el más avanzado tratamiento con láser que evita la cirugía de los párpados.